Archivo de la etiqueta: hebreos

¿Qué clase de fanáticos adoran a este Dios?

Ramsés en Exodus: Dioses y ReyesComo aprendimos en Noé, Dios es terriblemente cruel y sin piedad. En esa peli cometía un genocidio sin ningún tipo de remordimiento y ahora, en los cines, tenemos un nuevo ejemplo de ese comportamiento desalmado: Exodus. Dioses y Reyes.

En este caso, Dios quiere que los egipcios liberen a los hebreos. ¿Qué harías tú para liberarlos si fueses un ser todopoderoso?

a) Ordenarlo, y punto.

b) Hacer que todos los egipcios se duerman para que los hebreos huyan libremente.

c) Crear a seres humanos de tal modo que sean buenas personas y consigan soluciones amistosas, sin disputas.

d) Enviar 10 plagas terribles que asesinen a prácticamente todos los animales de Egipto y, por supuesto, a cada niño, causando así un sufrimiento brutal a cada familia del país.

Si eres un dios cruel, sabes que la respuesta correcta es la «d».

Ramsés (y supongo que prácticamente todos los espectadores del filme) no entienden a un dios tan terrible, así que le pregunta a Moisés: «¿Qué clase de fanáticos adoran a este Dios?».

Pues bien, en esta peli ese Dios terrible es un niño siniestro, que es una mezcla perfecta entre Caillou y un enano. Estoy seguro de que Ridley Scott vio al acondroplásico de Lords of Salem y se dijo: «Eh, si ellos tienen un demonio diminuto nosotros contraatacamos con nuestro propio dios canijo».

Si quieres ver Exodus, debes saber que son «sólo» 150 minutos de información ya conocida y un montón de bostezos, y aunque tienen a cientos de extras incluso las batallas son aburridas.

Alguien debería haber asesorado de nuevo a Scott sobre la nariz de la Esfinge, que fue destruida en tiempos de Napoléon, muchos, muchos años después de este mito. Y quizás para hacer la historia un poquito más real, que le hubiera dicho que las pirámides jamás fueron construidas por esclavos, ni hebreos ni de ningún otro tipo. Sé que eso de los esclavos a los que les dan latigazos mientras arrastran enormes bloques de piedra es muy cinematográfico, pero no es real, aunque mucha gente se lo trague.

En fin, que ya estás advertido de lo que hay, ahora eres libre de entrar bajo tu propia responsabilidad.